Este pasado sábado tuvimos la oportunidad de disfrutar de un magnífico día en el Barrio de Benimámet, paseando por sus calles de la mano de 3 de sus ilustres vecinos.
Llegamos prontito, para poder disfrutar con tiempo y porque, qué mejor forma de arrancar la jornada que con un tradicional “esmorzaret”, en el “Bar Las Palmeras” uno de esos lugares de toda la vida que guarda el encanto de los sitios de siempre. Allí nos esperaba una bonita sorpresa, íbamos a poder visitar la exposición “Passeig per Benimámet antic” en la que disfrutar de una curiosa y cuidada recreación en maqueta de sus calles y edificios emblemáticos, y como no podía ser de otra forma, acompañados por su artista creador y Vecino Ilustre Andrés García, quien creció en estas calles.
El día no había hecho más que empezar, pudimos ver los murales pintados recogiendo estampas de los espacios de la vida del barrio que nos hacen recordar que, como versa uno de ellos “les notres arrels son el s que ens fan como som” (“nuestras raíces son las que nos hacen como somos”,) volviendo la vista atrás conectando pasado, presente y futuro.
Los árboles centenarios que parecen tocar el cielo, el olor a hierba paseando por el Parque Lineal, los perros que corretean tras una pelota, la risa de los niños que juegan en el parque, el frescor y la humedad en la cara tras varios días de lluvia, las conversaciones cruzadas con las personas que se suman nuevas a nuestro peculiar grupo…. Poder mirar la vida más allá de los ojos…
“¿Dónde nos llevas Julián?” a una preciosa alquería que os va a encantar… calle por aquí, calle por allá, escalones, arcenes, aceras…. Y ¿ese olor tan rico?… ¿Recordáis cómo huelen los hornos de pueblo y los hornos de barrio?, ¡eso es! a pan recién hecho y a magdalenas calentitas… Cómo no íbamos a hacer parada para cargar con unas cuantas bolas de coquitos, almendrados, rollitos de anís, barquillos de chocolate, coca de nueces y pasas….
Nos decía Mari Carmen Barea, “desde la Asociación de Vecinos estamos trabajando para hacer de Benimámet un barrio más accesible, sostenible e integrador en el que quepan todas las personas, mejorando la señalítica por ejemplo, entre otras cosas”. ¿Os habéis parado a pensar alguna vez los retos a los que se enfrentan cada día las personas, que como en este caso nosotros, tienen distrofias hereditarias de retina para moverse por las calles?.
Y, ¡Qué bien comimos!, ya solo nos quedaba una visita al velódromo que cerquita nos quedaba, pasando por el chalet de Panach y su jardín que es un pulmón verde para el barrio, paseable y en el que como no, nos hicimos otras tantas fotos más.
Disfrutar de estos RetiSábados en familia es otra manera de mostrarnos al mundo, cuidándonos los unos a los otros, cargando la pila que nos impulsa siempre hacia delante, unidos, seguros y demostrando, que podemos estar limitados, pero jamás impedidos.
Si te despierta la curiosidad, no te quedes con las ganas de conocernos, te esperamos en nuestra próxima quedada.